La epilepsia es un trastorno del sistema nervioso central (neurológico) en el que la actividad cerebral se altera provocando convulsiones o periodos de comportamientos inusuales, llegando incluso a la perdida de consciencia. Los síntomas de la epilepsia suelen variar mucho y es necesario que se produzcan dos episodios con contusiones con una diferencia de 24 horas.
Las consecuencias derivadas de los ataques pueden ser muy variadas:
Las físicas pasan por hematomas, fracturas, dolores de cabeza ... y las mentales suponen sobre todo alteraciones del estado de ánimo, ansiedad, estrés, miedo, depresión ...
¿CÓMO PUEDE AYUDARNOS EL CBD?
Las personas con epilepsia sufren una reducción de los niveles de ANANDAMIDA.
La ANANDAMIDA es el principal componente del sistema endocannabinoide encargado de mantener el el equilibrio fisiológico del organismo, influyendo directamente en los sistemas neurológicos endocrino e inmune.
El CBD regula el sistema endocannabinoide e incrementa los niveles de Anandamida, regulando la descompensación que sufren los pacientes con epilepsia.
EFCIACIA DEL CBD EN EL TRATAMIENTO DE LA EPILÉPSIA
El CBD puede ser un tratamiento muy eficaz con el que prevenir, y tratar la epilepsia y sus consecuencias gracias a todas sus propiedades:
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- Neuroprotector y antioxidante: Reduce los daños y el desgaste neuronal mejorando los posibles problemas cognitivos.
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- Ansiolítico y antidepresivo: Mejora el estado de ánimo y las consecuencias emocionales debidas a la ansiedad provocada por su estimación social.
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- Anticonvulsivo, y antiepilépticos: Reduce y previene las convulsiones tanto en frecuencia como en la intensidad de las mismas)
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- Antiinflamatorio y analgésico: Mejora los problemas físicos provocados por las crisis epilépticas.
EFECTOS SECUNDARIOS
El CBD es una sustancia segura incluso ingerida en grandes cantidades, aún así los efectos adversos suelen ser de leves a moderados, y pueden presentarse en forma de: mareos, cansancio, somnolencia, disminución del apetito o mareos,
Desde organic club te recomendamos siempre contar con el consejo de un profesional médico y su supervisión de sus tratamientos.
