¿Qué es la fibromialgia?
La fibromialgia es una afección crónica caracterizada por la presencia de dolor crónico músculo esquelético c on un bajo umbral para el dolor.
Estos sintomas suelen coexistir con cuadros de ansiedad, depresión, fatiga e insomnio. En algunos casos también se pueden sufrir cefaleas, rigidez articular, o problemas de concentración y memoria.
Todos las sintomatologías que presentan los pacientes de fibromialgia pueden tratarse con cannabinoides.
El CBD nos proporciona un efecto antioxidante, ansiolítico, antidepresivo, y antiinflamatorio, muy útil en el tratamiento de las dolencias que caracterizan esta enfermedad, ya que suelen presentar diversos focos inflamatorios durante todas sus etapas.
La forma más eficaz de consumir CBD para el tratamiento de cualquier tipo de dolencia es a través de los aceites ya que al aplicarlo de forma sublingual , pasa de forma directa a nuestro torrente sanguíneo, lo que
significa que al no tener que digerirlo se acelera su efectividad, aportando de forma inmediata sus propiedades antiinflamatorias y reguladoras de las células nerviosas.
Estas propiedades en combinación con su efecto relajante pueden resultar muy útil para controlar el estrés, conciliar el sueño, mejorar el descanso o reducir la rigidez muscular.
El CBD además de interferir en la transmisión del dolor desde las células nerviosas al cerebro, activa los receptores de la serotonina responsable de la sensación de bienestar y buen humor.
Diversos estudios han demostrado que una deficiencia de de nuestro organismo en la producción de cannabinoides podrían ser la causa del dolor crónico.
Hay que destacar que nuestro organismo produce sus propios cannabinoides de forma natural por lo que si administramos CBD se compensaría esta deficiencia eliminando de forma inmediata el dolor o cualquiera de los síntomas regulados por el sistema endocannabinoide.
¿Cómo usar el aceite de CBD?
Desde Organic Club CBD siempre recomendamos que, para tratar cualquier tipo de dolencia, comenzar con una dosis de baja a moderada (3/4 gotas sublinguales) y de ahí ir aumentando si fuera necesario hasta encontrar nuestra dosis perfecta.
Al tratarse de dolencias que necesitan un tratamiento (no son molestias producidas de forma puntual) lo recomendable sería aplicar dos dosis diarias una nada más despertarnos (si es en ayunas mejor) y la segunda 30 min antes de ir a dormir.
Si a lo largo del día se produjese un nuevo pico de dolor, estrés o ansiedad podremos repetir dosis tantas veces como sea necesario ya que el CBD no provoca dependencia y no genera tolerancia, es decir:
Si en cualquier momento dejamos de consumirlo nuestro organismo no lo va a demandar, y el número de gotas que sean eficaces al inicio lo serán siempre y no necesitaremos administrar más cantidad.